El conejo es una opción muy saludable. Se trata de carne blanca con muy poca grasa, rica en proteínas de alto valor y sumamente nutritiva. Aporta unas 140 calorías por cada 100 gramos.
El conejo se puede preparar de infinidad de maneras. En esta ocasión traemos una receta simple, sin complicaciones y muy habitual en nuestra cocina. El toque especial se lo vamos a dar con un poco de mostaza.
Ingredientes (para 4 ó 6 persona)
1 conejo de un 1,200 kg o 1 y 1/2.
1 cebolla.
1 pimiento rojo.
4 dientes de ajo.
1 punta de guindilla (opcional).
1 cucharada de pimentón dulce de la vera.
1 cucharada de mostaza.
Tomillo (si puede ser fresco mejor).
1 vaso de vino blanco.
1 hoja de laurel.
Aceite de oliva virgen extra.
Agua.
Elaboración
Cuando compremos el conejo, le pedimos al carnicero que nos los trocee para guisar y que nos quite los ojos y los dientes
Ponemos a calentar una cazuela baja con aceite. Picamos en juliana la cebolla y el pimiento. Lavamos bien los ajos y los escachamos sin pelar. Rehogamos la cebolla, el pimiento y los ajo. Mientras, salpimentamos el conejo al gusto. Cuando el sofrito esta listo añadimos el conejo y seguimos rehogado hasta que esté doradito.
Cuando el conejo se haya dorado por todos lados, añadimos la cucharada de mostaza y revolvemos hasta que se mezcle bien. Hacemos lo mismo con el pimentón e inmediatamente incorporamos el vaso de vino para que no se queme. Esperamos dos minutos y agregamos el tomillo. Semicubrimos con el agua, tapamos la cazuela dejando la tapa un poco de lado y lo dejamos hacer sobre 45 minutos o hasta que a carne esté tierna. Hay que dejar que se haga bien y que el agua se reduzca a la mitad. Removemos de vez en cuando.
Ya tenemos un plato sano, bajo en calorías y muy nutritivo. ¡Adecuado para todos aquellos que se cuidan!
Os recomendamos que probéis esta deliciosa receta, estamos seguras de que repetiréis.
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